¿Aún no has elegido una carrera? No te preocupes, está todo bien.
Si estás buscando la universidad o recién estás comenzando tu carrera universitaria, puedes sentir que debes saber de inmediato en que quiere especializarte o qué carrera quieres seguir. Pero la verdad es que absolutamente no tienes que saberlo. Y no estamos tratando de ignorar o disminuir tus sentimientos y ansiedades cuando decimos esto porque definitivamente hay presión sobre los estudiantes de último año y primer año de secundaria, ya sea de ustedes mismos o de su familia y amigos.
No estás solo en tu incertidumbre. Uno de cada tres estudiantes no está seguro de que especialización se alinea con la carrera profesional elegida, y dos tercios de los estudiantes se sienten abrumados con el proceso de selección de una especialización.
Es por eso que debes tomarte un tiempo para contemplar sus opciones.
No te apresures a hacer tu elección, porque si eliges la incorrecta, se desperdiciarán años de tiempo, dinero y energía. Dejae los folletos universitarios a un lado por un tiempo y piensa en lo que finalmente funcionará mejor para usted. Recuerda, es una combinación de soñar y pensar de manera realista.
Aquí hay algunos consejos para ayudarte con la elección de lo que quieres estudiar:
NO TE BASES EN TUS INTERESES ACTUALES: Al decidir que especialización tomar, siempre debes considerar tus intereses porque tu nivel de fascinación por un determinado campo tendrá un gran impacto en tu desempeño. Si no te gusta lo que haces, no serás feliz y no sobresaldrás en tu campo. ¿Quién querría eso? Considera tus intereses, pero no te detenga en tus intereses actuales.
Según tus intereses "actuales", estos son los que crees que disfrutas ahora, pero podrías dejarlos en el futuro. Estas son fascinaciones fugaces. Si de repente te interesa el maquillaje, lo más probable es que ir a la escuela de belleza no sea para ti.SE REALISTA: No todos pueden elegir un programa solo porque es su pasión. A veces, las circunstancias se interponen, por lo que debes conformarte con elegir el programa que parezca realista, pero que satisfaga, al menos, parte de tus pasiones. Si deseas estudiar Diseño de Interiores, pero la universidad más cercana que lo ofrece está a ciudades de distancia y mudarse te costaría demasiado, entonces puedes conformarte con programas similares como Arquitectura.
Ser realista también significa que comprende las dificultades de tomar ese programa. Si siempre has querido ser abogado, pero odias memorizar y leer, es posible que debas reevaluar cuánto deseas realmente ser abogado. Recuerda, alcanzar tus sueños requiere mucho trabajo duro. Asegúrate de estar listo para hacerlo.
IMAGÍNATE DENTRO DE UNOS AÑOS: ¿Quieres ser cirujano? Imagínate en el hospital diez años después de terminar la escuela. ¿Crees que tu futuro yo sería feliz? Si es así, adelante. Si no, desecha la idea. Siempre debes pensar en el futuro porque tu programa universitario puede determinar en gran medida cómo se moldeará su vida. Es probablemente una de las decisiones más grandes y aterradoras, de verdad. Si es posible, piensa en tu felicidad futura con cada decisión que tomes.